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06.03.19

Los colmillos del Presidente

(7 Miradas) Muy comentado fue el final del discurso, arengando –dicen que fuera de libreto- y mostrándose emocionado como en el Colón del G20. El presidente mostró los colmillos. Muchos periodistas dijeron que ese había sido el inicio de la campaña electoral: tono firme de quien está dispuesto a dar pelea.
Por Carlos Fara

(7 Miradas) Los opositores lo torearon y el presidente reaccionó en el Congreso. Pero no fue lo único que pasó. También la barra oficialista cantó “no vuelven más”, y Macri dijo que sus fundamentos económicos habían funcionado durante 2 años y medio, generando todo tipo de memes en las redes. Un inicio de sesiones tenso.

Muy comentado fue el final del discurso, arengando –dicen que fuera de libreto- y mostrándose emocionado como en el Colón del G20. El presidente mostró los colmillos. Muchos periodistas dijeron que ese había sido el inicio de la campaña electoral: tono firme de quien está dispuesto a dar pelea. El que no se achica. Otro contrapunto entre “civilización y barbarie”, según su manual implícito.

No solo porque se habló mucho del tema, sino además porque si fue el lanzamiento de su candidatura, conviene detenerse en los criterios con los cuales se debe evaluar este tipo de escenas.

  1. El contexto general. El presidente está en uno de sus puntos más bajos de aprobación en 3 años de mandato. Hasta su propio público se siente defraudado. Pues ¿este final brioso ayuda a su recuperación general? Difícil decirlo porque un cambio de tendencia no se juega en una sola escena, sino que necesita una ilación de hitos para que vaya tomando cuerpo una impresión distinta. O: una golondrina no hace verano.
  2. El humor social. Las cosas van mal y el presidente se muestra brioso. Cómo le cae al defraudado? Lo más probable es que mire con cierto escepticismo, porque para él / ella, el dinero sigue sin alcanzarle, y teme tener que seguir ajustándose. Estará más cerca de “¿Y éste por qué se pone así?”.
  3. La escena específica. Era el último cara a cara de Macri con sus opositores más furibundos ¿se podía esperar una escena tranquila? ¿no iba a aprovechar el kirchnerismo para sacarlo de sus casillas? ¿lo tomó por sorpresa o iba preparado? Desde Casa Rosado dejaron trascender que fue espontáneo…
  4. El estilo Macri como contrafigura. Desde el inicio toda la estrategia comunicacional del primer mandatario estuvo destinada a generar una contrafigura con la parte del estilo que molestaba de CFK: tranquilo vs. efusiva, desideologizado vs. ideologizado; humildad vs. soberbia; conferencia de prensa vs. cadena nacional; etc. Si el Macri del Congreso se verifica permanente en el tiempo, implica un volantazo importante, pues ya no apostaría a un estilo tan light y despolitizado, para pasar a absorber algunos rasgos de ella. ¿Habrán detectado que el Macri bajas calorías ya no genera nada? ¿lo que fue rentable en algún momento dejó de serlo? ¿y entonces era una buena oportunidad de mostrarlo encendido justo cuando lo iban a provocar?
  5. Supongamos que hay detrás un cambio sustancial en la estrategia. a) ¿el personaje lo asimiló tanto que ya lo encarna como el mejor actor a un papel? b) ¿el cambio implica el reconocimiento de un fracaso conceptual? c) ¿estará destinado al primer objetivo de base que es blindar a sus incondicionales, para que recuperen bríos y así convertirse en viralizadores cotidianos (como el kirchnerismo)?

Muchos interrogantes que no pueden tener respuesta inmediata. Pero son lo suficientemente importantes como para volvamos sobre ellos en más de una oportunidad en este año electoral.

Fuente: 7 Miradas (Buenos Aires, Argentina)