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29.04.19

Santa Fe dio la nota

(Letra P) Por estas horas circulan muchos análisis improvisados sobre alianzas entre dirigentes para re direccionar votos de cara a la general, o una eventual polarización entre 2. Si leyeran en profundidad la complejidad santafesina, se darían cuenta que los ciudadanos toman sus decisiones más allá de los acuerdos de cúpulas.
Por Carlos Fara

(Letra P) Es muy complejo analizar los resultados de la provincia de Santa Fe en función de su historia electoral reciente, ya que la foto de las PASO no es necesariamente la de la general. Repasemos dos datos:

  1. En 2011 y 2015 hubo una fuerte transferencia de votos entre las primarias y la general. En 2011 Miguel Del Sel (PRO) sacó 241.000 votos y en la general 615.000 (2,4 veces más). En 2015 Omar Perotti sacó 365.000 votos en las PASO y 558.000 en la general (53 % más) generando un triple empate.
  2. En las 2 últimas elecciones provinciales, el tercero en las PASO hizo una elección sorpresiva en la general, por ser “el nuevo” en el escenario.

A partir de eso, existe un oficialismo provincial que tuvo el candidato más votado individual, pero frente a un peronismo revitalizado por efecto de una unidad que los cobijó a todos y que se puede ilusionar con dar el zarpazo. De esta manera Santa Fe da la nota porque se abre la puerta para que se produzca un cambio local, a diferencia de las 5 comicios previos provinciales de este año.

El Frente Progresista (FP) hizo su peor elección primaria de los últimos 3 comicios: pasó del 41 % en 2011 a este pálido 31 %, además de haber perdido el socialismo la primaria en la cuna del proyecto –Rosario- frente a un ex “lilito” (Jakvin). Es decir: el próximo intendente ya no será socialista al menos, aunque cabe que el FP pueda continuar gobernando. Esto marca el grado de desgaste que ya venía registrando el proyecto socialista desde 2015, pese a la muy buena imagen del gobernador Miguel Lifschitz.

Cómo se debe evaluar el desempeño de Cambiemos? Teniendo en cuenta que su candidato a gobernador hacía su estreno en una elección provincial –frente a 5 competencias previas de Omar Perotti y 4 de Antonio Bonfatti- arañar el 20 % no está mal. Miremos estos antecedentes: Del Sel y  Perotti obtuvieron el 13 % en su primera elección provincial; Corral está sacando un 50 % más que ellos dos. Incluso logra más votos que Bonfatti en su debut (primaria 2011). Teniendo en cuenta que la elección se realizó en la peor semana de los 40 meses de la gestión Macri, y siendo su debut en estas lides, es meritorio.

Por qué el escenario sigue abierto? Porque en 2011 el peronismo obtuvo en primarias el 43 % de los votos, pero luego en la general solo se quedó con el 23 %. En 2015, por el contrario, pasó del 22 % en primarias al 30 % en la general. Ahora arranca con el 43 % de sus 2 listas. Si bien nunca se transfieren todos los votos entre sectores internos, si Perotti (ganador de la primaria) logra retener solo la mitad de los electores de María Eugenia Bielsa, tiene todo el derecho a un regreso del justicialismo al poder.

Por estas horas circulan muchos análisis improvisados sobre alianzas entre dirigentes para re direccionar votos de cara a la general, o una eventual polarización entre 2. Si leyeran en profundidad la complejidad santafesina, se darían cuenta que los ciudadanos toman sus decisiones más allá de los acuerdos de cúpulas.

Ultimo comentario sobre las eventuales derivaciones nacionales del resultado de ayer: 1) el peronismo unido –como en Santa Fe y Entre Ríos- tiene con qué ilusionarse a nivel nacional, sobre en este contexto de grave situación económica; 2) el agridulce triunfo del FP empieza a poner interrogantes sobre la solidez de los socios políticos del proyecto Roberto Lavagna.

Fuente: Letra P (Argentina)