(7 Miradas) Un escenario negativo y complejo para el gobierno, que igualmente está logrando ya 2 meses de anclaje del tipo de cambio oficial, moderación del paralelo y freno a la caída de reservas. Pierde la mayor parte de la batalla en la opinión pública, pero no del todo: los empresarios y comerciantes también reciben su reprimenda.

Por Carlos Fara

(7 Miradas) Momento de recuento de daños: la gran pregunta es qué queda después de un verano agitado. Veamos los números frescos comparados con diciembre:
-Cuando la presidenta salió de su operación, y antes de la huelga policial de diciembre, tenía una aprobación del 51 %. Luego de los saqueos, devaluación, disparada de la inflación, su gestión es aprobada por el 43 %. No tan mal teniendo en cuenta todo lo que sucedió.
-Su imagen positiva personal bajó del 41 al 33, y su negativa ascendió del 30 al 40 %.
-Los que creen que Argentina va por el mal camino, descendieron del 41 al 29 %. Hay que remontarse a la crisis del campo para encontrar un valor tan bajo.
-El optimismo sobre la situación personal / familiar pasó del 61 % al 50 %. Este es el nivel que había cuando se empezó a aplicar el cepo para la compra de dólares para ahorro a mediados de 2012.
-De todos modos, el 82 % cree que la presidenta concluirá su mandato (frente a los rumores que se escucharon durante el verano).
-El 57 % está de acuerdo con que el gobierno hizo cambios en la economía en los últimos dos meses.
-De la misma manera que ocurría con el congelamiento de precios de Moreno, el 67 % está de acuerdo con el programa Precios Cuidados. Sin embargo, el 58 % no cree que los precios se hayan frenado; el 24 % estima que “en parte”, y sólo el 14 % responde afirmativamente.
-En ese marco, la preocupación por la inflación trepó del 38 % en diciembre, al 53 % en estos momentos.
-El nuevo índice de precios del INDEC no generó credibilidad: el 53 % entiende que es “otra mentira del gobierno”, teniendo legitimidad para el 22 % (el 25 % no tiene opinión formada aún).
-Respecto a los orígenes de la inflación hay opiniones divididas: el 40 % se lo atribuye a los errores de la política económica del gobierno, el 33 % a “los empresarios que quieren tener ganancias extraordinarias”, y el 15 % a “los comerciantes que aprovechan la devaluación para aumentar”.
Como se puede ver, un escenario negativo y complejo para el gobierno, quien de todos modos -como venimos señalando en estas páginas- está logrando ya 2 meses de anclaje del tipo de cambio oficial, moderación del paralelo y freno a la caída de reservas. Pierde la mayor parte de la batalla en la opinión pública, pero no del todo: los empresarios y comerciantes también reciben su reprimenda.
Esta es sola una fotografía. La inflación se moderará tarde o temprano. Pero hasta que eso suceda el clima no será el mejor. Lo más probable es que Argentina llegará con turbulencias a la elección presidencial. ¿Habrá segunda vuelta con la incertidumbre que implican esos 20 días de campaña?

Fuente 7 Miradas (Buenos Aires, Argentina)