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22.10.12

De rumores, cambios y rumores de cambios

Con una participación del 89,61 % del total de los registrados, las elecciones en Cuba pasan inadvertidas por su insignificante repercusión en la toma de decisiones del gobierno cubano, ya que en un sistema unipartidista son vedados los demás partidos políticos e iniciativa, no existen las campañas electorales y todo es administrado por la Comisión Nacional Electoral, ergo no son libres.
Por Micaela Hierro Dori

El periódico cubano Granma es tan irónico que publicó un artículo titulado “Fidel Castro está agonizando” con autoría del mismo Fidel, quien llama aves de mal agüero a quienes publicaron los rumores que Castro había sufrido una embolia masiva en la arteria cerebral derecha. Esta es una respuesta a la prensa internacional y las redes sociales que se han hecho eco de dichos rumores. Rumores que ya no son novedad cuando se trata de Fidel Castro. En especial, por el descreimiento general de la población cubana de algún tipo de cambio ante la muerte del  máximo líder del régimen castrista, y el convencimiento que la estructura partidaria y el nuevo liderazgo de Raúl Castro harán que se mantenga el status quo en la isla.

Para ello, Raúl busca estratégicamente mostrar distintos pasos de apertura, que no son más que un engaño a la prensa internacional. Dado que al mismo tiempo que toma medidas, como la reciente  flexibilización de la política migratoria, aumenta la represión a los movimientos democráticos que sí trabajan por la apertura democrática y económica. Acaso, no es lógico preguntarse ¿Si Raúl trabaja sinceramente para la apertura económica y democrática de Cuba por qué obstaculiza el trabajo de los que llevan la misma bandera de lucha?

Palomas mensajeras cubanas colaboran con el escrutinio

Las palomas mensajeras contribuyen con las elecciones en Cuba.
Foto: Perlavision.icrt.cu

Es posible advertir un cambio de táctica en la represión de la policía política cubana con el objetivo de evitar una significativa repercusión negativa a nivel internacional, pues en vez de haber nuevos presos políticos se realizan operativos de encarcelamientos exprés donde miembros de la disidencia son detenidos por horas, con un promedio entre 4 hasta 24 horas. Así, cuando llega a los medios la noticia de la arbitrariedad de los operativos de detención en domicilios o en manifestaciones pacíficas, y dichos medios chequean la denuncia, las víctimas de la represión ya son liberadas por lo que no se llega a publicar ni se da a conocer los hechos que se repiten –sin exagerar- diariamente.

Todas las medidas de cambio anunciadas por Raúl, como las de libre construcción de viviendas, del cuentapropismo para libre iniciativa económica, no resolvieron ni los problemas de vivienda ni de escasez que sufre el ciudadano cubano y no otorgaron la plena libertad que espera hace más de 50 años el cubano común. Por lo contrario, el Estado se libró de responsabilidad de dar respuesta a la falta de vivienda y empleo ante el ahogo económico que enfrenta hace años, otorgando una libertad que no puede ser ejercida en la práctica mientras que no se de pleno ejercicio de los derechos económicos, sociales y políticos que aún cautivos del sistema político cubano

Medidas que no son más que una puesta en escena por parte del régimen socialista igual que las elecciones celebradas el pasado domingo 21 de octubre para elegir a los delegados a las Asambleas Municipales del Poder Popular con una participación del  89,61 % del total de los registrados.

Elecciones que pasan inadvertidas por su insignificante repercusión en la toma de decisiones del gobierno cubano, ya que en un sistema unipartidista son vedados los demás partidos políticos e iniciativa, no existen las campañas electorales y todo es administrado por la Comisión Nacional Electoral,  ergo no son libres. Elecciones que no son dignas ni de rumores. Y si es cuestión de hacerse eco de algún rumor, habría que decir que el sistema económico cubano está tan moribundo como su propulsor, y todo anuncio de cambio y apertura es tan verdad como los anuncios de buena salud del líder cubano.